sábado, 4 de marzo de 2017

Tiempo de espera para Las Cabezadas

Las Cabezadas, situadas entre el Tajo y el antiguo Camino Real de Toledo, es una de las última actuaciones del urbanismo depredador del Sur de Madrid. Es similar en extensión al desarrollo de Montecarmelo en Madrid y como él podrá alojar siete mil nuevas viviendas. En su desarrollo han confluido tiburones urbanistas, instituciones venales en situación crítica y entramados de empresas diseñadas para la evasión de capitales como objetivo y con la vista puesta en el abandono del proyecto. Los restos serán después suelo baldío, más viviendas sin ocupar, ejecuciones subsidiarias de urbanizaciones con fianzas que no alcanzan para cubrir su importe y recursos públicos enterrados en cemento.

El proyecto fue concebido por la administración local del Partido Popular de José María Cepeda y aprobado por la administración del Partido Socialista de Jesús Dionisio Ballesteros. Aunque su interés edafológico limitaba las construcciones que comprometieran su capacidad de producción agrícola, una modificación puntual del PGOU reclama para el concejal de Aranjuez, David Estrada, el mérito exclusivo de remover la ultima de sus protecciones y dá por buena una modificación puntual de 2,5 millones de metros cuadrados por encima de legalidad urbanística y la Jurisprudencia del Tribunal Supremo.



Las Cabezadas han sido terreno propicio a lo oscuro y lo depredatorio. El arquitecto favorito de Luís Roldán redactó este concurso. El empresario preferido de Luis Barcenas, Luis Delso, fue su promotor a través de una red empresas interpuestas y lo controló a través de IsoluxWat mediante un convenio cuyas contrapartidas son desconocidas. Cuando el cerco de la UDEF se estrechaba sobre él, ISOLUX Wat transfirió sus derechos a una mercantil desconocida hasta entonces, Las Cabezadas SL, una empresa con 4 millones de euros de patrimonio negativo nacida el tiempo que las previsiones urbanísticas. Para ello, transformó una empresa dormida hasta entonces y sin ningún movimiento empresarial y la controló mediante su empresa filial de Luxemburgo. Luis Delso recibió entonces sus primeras plusvalías.

Poco tiempo después, apareció en escena Caja Castilla La Mancha con sus caudales exhaustos y a punto de caramelo para la intervención bancaria. Aún así, entra en el juego e intercambia representación con Las Cabezadas asegurándose ambas el control mutuo. Todo queda entre amigos y Luis Delso recibe su segundo paquete de plusvalías. Finalmente, sus dificultades con la UDEF motivaron su alejamiento de los destinos de Isolux Corsan.

Caja Castilla La Mancha fue intervenida y transferida a Liberbank junto con la deuda hipotecaria del Ayuntamiento de Aranjuez. Sus derechos en Las Cabezadas los gestionó Castilla La Mancha Corporación, los restos del colosal naufragio de Hernández Moltó, y luego se transformó en Inversiones Corporativas a fin de que nada recordara el desastre. Isolux Corsan dirigido por Nemesio Fernández Cuesta recuperó el control de Las Cabezadas SL y los alcaldes de Aranjuez, del Partido Popular y el Partido Socialista, desaparecieron del escenario movidos uno por la inhabilitación y otro por las urnas. Aquí paz y después gloria.

A los actores principales y secundarios se los ha llevado el tiempo y la UDEF, se produjo un baile millonario de euros en participaciones y venta de derechos que cogieron el portante caminito de Holanda y Luxemburgo. Queda lo peor: las reclamaciones económicas sobre el Ayuntamiento de Aranjuez, la duda sobre la viabilidad del proyecto, su peso sobre su hiper-obesa deuda y la amenaza literal sobre la viabilidad del futuro institucional. También queda la incógnita sobre la decisión futura de los tribunales en la búsqueda de responsables en un asunto infestado de tiburones y bucaneros.  El tiempo lo dirá aunque puede que ya no quede.

No hay comentarios:

Publicar un comentario